El puma de Urrao (segunda parte)

Imagenes de Puma concolor. Reserva el Humedal – Urrao Antioquia

Fuimos invitados a un viaje de 3 días por Esteban Dominguez a conocer una reserva en la que lleva trabajando varios meses en las tierras de un paisano suyo, Jessid., pero antes de introducirnos en el bosque,  hicimos un rápido  recorrido por el segundo municipio más grande de los 125 que tiene el departamento de Antioquia.  Comenzamos nuestro reconocimiento por el barrio Jaiperá con su particular arquitectura de casitas pequeñas pintadas de distintos colores. En el pueblo fuimos a almorzar donde El Coste por sugerencia de Esteban, en ese lugar literalmente aplica el dicho de “pregunté por lo que no vea” un menú tan variado que hasta suero costeño nos sacaron.

Salimos a caminar y Esteban nos iba contando historias de su pueblo, conversamos sobre las problemáticas del lugar y  sobre cuáles eran los aspiracionales de los jóvenes que a veces distan mucho del tema de la conservación. De paso nos encontramos a Nepo, un señor de ochenta y pico de años que toda la vida repartió lotería en su bicicleta. Dice Esteban que recorría más de 40 kilómetros al día y que era difícil alcanzarlo. Quién sabe si Rigo pedaleo a su lado. El caso es que Nepo nos hizo reír como locos con su sonido del gato. 

Pasamos la tarde tomando café en el parque, hay un local llamado café Paraíso que hace parte de un programa de emprendimiento de Jóvenes del municipio que manejan toda la cadena productiva desde la siembra hasta la comercialización.
La noche la pasamos de tertulia, herborizando los hallazgos del día y conversando con el profesor Cogollo sobre su travesía en el nudo del Paramillo. Coincidímos el profesor y yo en nuestro deseo de conocer el lugar que da origen a los ríos San Jorge y  Sinú que bañan la sabana cordobesa. El profe ya cumplió el sueño, yo espero tener la oportunidad de cumplir algún día el mío.

​Al día siguiente fuimos a conocer la plaza de mercado con sus puestos de panela, papa y variedades de frijol. Allí saludamos a don Pastor Moreno que nos explicó sobre las distintas clases de leguminosa que aún se conservan en el valle del Penderisco y que es una riqueza cultural que lucharán por no dejar perder. En la plaza se ven por todos lados artefactos de Comino Crespo (Aniba perutilis) un árbol  de madera muy fina que era abundante en estás tierras pero que fue talado hasta casi su extinción. Hoy, esta laurácea, pariente del aguacate,  se encuentra en el libro rojo de especies amenazadas en Colombia 

Salimos de la plaza en un viaje que nos llevaría hasta la frontera con el Parque Nacional Natural Las Orquídeas, el paisaje es impresionante y aunque hay mucha zona deforestada, todavía se ven grandes extensiones de bosque nativo bien conservado. No obstante, sobre estás tierras, recaen grandes amenazas con el fin de la guerra. Al parecer las entrañas de estas montañas guardan en su interior gran riqueza. Se especula que hay oro y minerales preciosos como el Coltan que muchas personas  y empresas llegarán con la intención de explotar,  ¿podrán entonces los urraeños ante la tentación del “desarrollo minero” valorar las aguas claras y potables, los secretos botánicos y respetar la casa de los grandes mamíferos como el Puma Concolor? Ya veremos


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Al llegar a la casa, el hijo del señor que cuida el terreno, saluda emocionado a Esteban y le dice con sorpresa y alegría “cayo el puma”. Hace unas semanas, instalaron algunas cámaras trampas con el objetivo de observar el tipo de fauna que rodea el ecosistema del enorme humedal. Este lugar, había permanecido oculto y sin oficio para los dueños del terreno, que llamaron a Esteban para ver si ese “pantanero” lleno de helecho y plantas tenía algún valor. Cual fue la sorpresa de Esteban al encontrar un paraíso hídrico y botánico, más tarde ese día comprobaríamos de la mano del profesor Cogollo, que también está lleno de especies raras y una que otra que incluso puede ser nueva para la ciencia. ​

 

Caminamos la montaña, nos adentramos en el bosque y con mi buena observación, descubrí con impresión un excremento  lleno de pelos, cuero y uñas que indudablemente perteneció a un animal grande y carnívoro. Luego de un rato, llegamos al sitio donde Esteban había ubicado la cámara trampa. Descargó al computador el contenido de imágenes recopiladas durante varios días y ahí estaba, un enorme puma, que visitaba recurrentemente en las noches ese mismo lugar donde estábamos parados, vimos entre las imágenes otros felinos más pequeños y un ave similar a una paloma que casi todos los días aterrizaba a dejar su retrato, mirando muy atentamente a la cámara.

​Como si no fuera poco el hallazgo de las cámaras, unos pasos más adelante el profesor Cogollo encontró dos especies conocidas de sus amadas magnolias y una que puede ser nueva para la ciencia. Pero la sorpresa mayor, que vino acompañada de aplauso y ovaciones fue el encuentro con una planta de la familia de los encenillos que fue nombrada en honor al profesor Cogollo (Weinmannia cogolloi ) y la cual solo había visto el día que la conoció por primera vez  por allá en los años 80 y está vez en el humedal a donde nos había invitado esteban.

​Después de fotografiar hermosas orquídeas, que por lo visto se sentían muy cómodas alrededor del humedal, la noche fue llegando y nosotros estuvimos un buen rato, pisando colchón de musgo y helecho, tratando de buscar la salida. Todo fue emoción ese día.
Esteban visitó a Doña Lucia la dueña de los terrenos  para mostrarle el descubrimiento, en esa finca campesina, nos comimos un espectacular arroz con leche y una granadilla, vimos el semillero de Comino crespo y la colección de orquídeas, miramos nuevamente el video y  nos alegramos con Esteban y Jessid por los frutos que empiezan a surgir de un trabajo bien hecho.

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